Las etiquetas de los alimentos que detallan cuánto ejercicio se necesita para quemar el contenido calórico de un producto podrían ayudar a combatir la obesidad, según investigadores del Reino Unido.
Las etiquetas de actividad física equivalente a calorías (PACE, por sus siglas en inglés) podrían mejorar las etiquetas que identifican solo las calorías y el contenido de nutrientes, según una nueva revisión científica.
Según el sistema propuesto, una pequeña barra de chocolate llevaría una etiqueta informando a los consumidores que tomaría 23 minutos corriendo o 46 minutos de caminata para quemar las 230 calorías que contiene.
La aplicación a gran escala de las etiquetas PACE podría, en promedio, reducir el consumo de calorías en hasta 200 calorías por persona a diario, según los investigadores, cuyo trabajo se publica en el Journal of Epidemiology and Community Health.
No obstante, se han planteado preocupaciones sobre el potencial impacto que tal etiquetado podría tener en las personas con trastornos alimenticios.
Los investigadores advierten que el número de estudios incluidos en la revisión fue pequeño, y la mayoría se realizó en entornos controlados en lugar de ambientes reales, pero aún así concluyen que vale la pena probar el etiquetado PACE.
Una reducción de aproximadamente 100 calorías por día, combinada con un aumento sostenido de la actividad física, podría reducir las tasas de obesidad, según Daley.
Otros estudios también han sugerido que reducir las calorías podría traer beneficios para la salud.
Reducir 300 calorías condujo a una presión arterial más baja y niveles de colesterol malo (LDL), así como a una disminución del 24% en las concentraciones de triglicéridos, un tipo de grasa en la sangre, para los participantes en un estudio publicado en julio.
FUENTE: EL MUNDO